Información en las empresas: poder y calidad
El desarrollo de las nuevas tecnologías de la información ha provocado que solo las empresas que sepan manejar dicha información sean capaces de obtener ventajas competitivas importantes.
La información es poder, siempre lo ha sido, pero quizás es ahora cuando esa variable resulta más importante, una herramienta fundamental para cualquier negocio.
La información permite a las empresas estar al tanto de la actividad de la competencia, de la situación del mercado, los posibles riesgos o fluctuaciones. También puede ofrecer datos fundamentales sobre el estado de nuestros proveedores y, sobre todo, de nuestros consumidores.
Ante cualquier decisión estratégica o de marketing, las empresas deben conocer la forma de extraer información valiosa que les permita afrontar la decisión con plenas garantías: lanzamiento de un nuevo producto, apertura hacia un nuevo mercado, motivos por los que la demanda se ha visto reducida, etc.
El inconveniente: las nuevas tecnologías ofrecen hoy en día cantidades ingentes de información que no siempre es fácil gestionar. Se debe realizar un análisis exhaustivo para delimitar qué información es realmente valiosa y cual es superflua o innecesaria.
Por ello, profesiones relacionadas con este concepto de big data se hallan altamente demandadas. Los expertos en big data o minería de datos ofrecen herramientas y modelos matemáticos para trabajar solo con la información relevante para el problema o necesidad al que se enfrenta un negocio.
Estos avanzados modelos permiten realizar proyecciones en el futuro, análisis controlados y facilitar la toma de decisiones.
En definitiva, la información resulta algo fundamental y valioso, pero su gestión puede convertirse en un quebradero de cabeza para muchas empresas. Dentro de nuestro sistema de gestión de calidad también se deberá integrar, lógicamente, un apartado para los sistemas de información.
La información puede generarse desde dentro de la propia organización: departamentos, comunicaciones internas, documentos, informes. Pero también desde fuera: análisis de mercados, tendencias socioeconómicas, perspectivas macro.
En cuanto al ámbito de la información podemos encontrar varias normas ISO que tratan de regularizar y garantizar la calidad:
- ISO 27001
Se encarga de registrar un conjunto de directrices para la correcta gestión de la información en las empresas: seguridad de la información, técnicas de cifrado, correcto almacenamiento en la nube, información del departamento de recursos humanos.
- ISO IEC 20000-1
Son un conjunto de estándares que deben cumplir las empresas que se dedican a proveer servicios relacionados con información: seguridad, ciberataques, adopción de nuevas tecnologías, etc.
Puedes leer más sobre otras normas en nuestra sección: Normas ISO.
Desde luego, la aceptación de estos estándares confiere a la empresa una ventaja competitiva frente a otros competidores. Proveedores y consumidores se hallan muy concienciados sobre la importancia de la seguridad de la información, por lo que prefieren relacionarse con empresas que cumplen estos requisitos y certificados.
Para la implantación de un sistema de gestión de calidad que, entre otras cosas, consolide el correcto uso de la información, es recomendable la adopción de un software de gestión que permita que este proceso se realice de forma sencilla, eficaz y rápida.
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