Calidad y mejora continua
El liderazgo es una característica muy importante en cualquier empresa. Por ello, en nuestro artículo semanal queremos incidir en el liderazgo en calidad como eje vertebrador de una buena gestión.
Existen muchos tipos de liderazgo empresarial. De hecho, desde este blog os hemos hablado de diversas estrategias de gestión y de algunos de los principales teóricos sobre el tema. Puedes leer más en nuestra sección: Estrategias de gestión.
La implantación de un sistema de gestión de calidad basado en normas ISO y en la mejora continua resulta un elemento clave capaz de garantizar no solo el éxito de una empresa sino también, en algunos casos, salvaguardar la supervivencia de nuestro negocio.
La norma ISO 9001:2015 ya articula de forma expresa la importancia del liderazgo en calidad a través de la mejora continua.
La alta dirección, a la hora de establecer sus objetivos a corto plazo y sus posteriores estrategias a largo plazo, debe trabajar siempre en el incremento de la eficiencia de los procesos organizativos y productivos.
A eso debemos añadir el hecho de que no basta con planificar el horizonte organizativo, sino también prever mecanismos que detecten y corrijan desviaciones respecto a esa planificación; de modo que se conseguirá una gestión fiable y eficaz a todos los niveles: mejora continua.
Las empresas deben confiar en la calidad y en la mejora continua de su organización como único camino hacia el liderazgo.
Ese liderazgo implica que las empresas mantendrán una posición proactiva frente a los cambios, esto es, no se dejarán llevar por las tendencias de los mercados y la economía, sino que preverán esos cambios y se anticiparán a ellos como única vía para ocupar una posición de liderazgo.
Este liderazgo se convierte en una inversión recuperable en el corto plazo. Siendo la solución más eficaz para obtener una ventaja competitiva, lo que se traducirá en una mejora de la cifra de negocios, asegurando la viabilidad de la empresa y de nuestra idea de negocio.
En esta situación tan compleja que atraviesan todos los mercados, parece que solo los líderes cuentan con el favor de los clientes y otras partes interesadas. Los clientes buscan empresas fiables, en las que se pueda confiar, trasladando una sensación de que esas empresas no nos van a abandonar y van a permanecer con nosotros durante mucho tiempo, por más que se sucedan avatares en los mercados nacionales e internacionales: guerras, cambios políticos, inestabilidad económica, alertas sanitarias o climáticas.
El liderazgo es algo que se debe replantear la alta dirección de manera sostenida en el tiempo. El liderazgo exigirá una serie de decisiones y posturas durante los primeros años de vida de la empresa, cuando presumiblemente solo sea un micronegocio, una empresa familiar o una Pyme.
Por tanto, conforme la empresa va creciendo en capacidad, tamaño y recursos, se deberán replantear nuevas estrategias de liderazgo y crecimiento adaptadas a su nueva naturaleza.
La norma ISO 9001 y otras normas ISO, aseguran que la alta dirección adopte esa orientación clara hacia el crecimiento y la mejora. De ahí la importancia de la implantación de un sistema de gestión de calidad para cualquier tipo de empresa y con independencia de cual sea su sector de actuación.
Desde Quattro siempre recomendamos la utilización de un software de gestión de calidad para facilitar el proceso de implantación de normas ISO y la obtención de la mejora continua.
Un software de calidad como Q-bo-org, garantiza que los procesos se controlen de forma eficaz, eliminando tareas innecesarias o duplicadas, desarrollando una mejor comunicación interna para que toda la empresa trabaje con la misma orientación: la calidad, el liderazgo y la mejora continua.
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