Normas ISO contra el coronavirus
Que las normas ISO se han constituido en los últimos meses en una herramienta fundamental para garantizar la supervivencia de las empresas supone una afirmación irrefutable: las normas ISO ayudan a luchar contra el coronavirus.
Las empresas son conscientes de que solo apostando por la mejora continua y la calidad podrán enfrentarse a un entorno y a un mercado cada vez más volátil y cambiante.
No en vano, las organizaciones que se rigen por modelos de calidad basados en normas ISO son mejor valoradas por los consumidores y resto de agentes que intervienen en el mercado (proveedores, distribuidores…) lo que se traduce en estructuras más sólidas y en un aumento directo de la cifra de ingresos.
Además, en esta lucha contra el coronavirus, las normas ISO han jugado un papel crucial a la hora de abordar la fabricación de determinados materiales que permiten luchar o atenuar los efectos de la pandemia, tal es el caso de materiales quirúrgicos, vacunas, materiales sanitarios de protección, mascarillas, respiradores, etc.
Normas ISO y coronavirus
En este contexto, las normas ISO se han puesto a trabajar para conseguir procesos seguros y fiables dentro del sector clínico y sanitario.
Como muestra, los avances conseguidos en las últimas semanas en todo lo relativo al calzado sanitario y antibacteriano, tan necesario en sectores relacionados con la salud pero también en otros relacionados: residencias de ancianos, clínicas de todo tipo, fisioterapia.
Además,también resultan importantes en otros campos como la industria de la alimentación, la cual está siendo observada con lupa debido a esa mayor concienciación que todos tenemos respecto a las epidemias, la higiene y la transmisión de enfermedades.
En estos sectores, las bacterias y los virus, en concreto el mencionado Covid-19, suponen una gran preocupación.
Normas como la ISO 21702:2019 (procedimientos antivirales) o la ISO 22196:2011 (procesos antibacterianos) establecen los mecanismos y procedimientos para acelerar la desaparición de sustancias peligrosas en la rutina de los trabajos, por ejemplo, a la hora de diseñar y fabricar trajes especiales o calzado antibacteriano que reduce la presencia del SARS-coV 2 a tan solo unas horas.
También la norma ISO 20345 (sobre el calzado de seguridad en el trabajo) ha complementado a las anteriores normas mencionadas, en la lucha por buscar la seguridad absoluta en el trabajo debido a la actual pandemia mundial.
Los consumidores se encuentran mucho más preocupados por la imagen que ofrecen las empresas que venden los productos y servicios que consumimos. Solo aquellas empresas que muestren un compromiso firme con la calidad y la mejora contarán con el favor del mercado.
Así pues, no basta con la implantación de determinadas normas ISO, sino que las empresas deben mostrar (y así debe ser percibido por el consumidor) un compromiso total con la calidad.
La calidad se puede aplicar no solo a sectores sensibles como el sanitario o el alimenticio, sino a cualquier mercado o ámbito, con independencia del tamaño o la actividad que realice una empresa.
En nuestras funciones de asesoramiento, poseemos más de diez años de experiencia trabajando con todo tipo de empresas en su camino para obtener la mejora continua y la implantación de sistemas de calidad basados en normas ISO.
Para ello hemos desarrollado Q-bo.org, un software de gestión que facilita el proceso en términos de tiempo y dinero. Reafirmando a la organización en el camino hacia la calidad y la eficiencia.
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